En un movimiento que ha generado gran interés entre usuarios y expertos en tecnología, Microsoft anunció a principios de este año la reintroducción de su programa de Actualizaciones de Seguridad Extendidas (ESU) , esta vez ampliando su alcance para incluir a los usuarios domésticos de Windows 10. . Aunque diseñado inicialmente para empresas y organizaciones, el programa ahora permite a los consumidores comunes extender el soporte de su sistema operativo más allá del final oficial de su ciclo de vida.
En este artículo, exploraremos en detalle qué implica este anuncio, los costos asociados y las limitaciones del programa ESU para los usuarios domésticos.
El fin del soporte de Windows 10: un cambio inevitable
El soporte técnico general para Windows 10 finalizará oficialmente en octubre de 2025 , poniendo fin a una década de vida útil. Esto significa que, a partir de esa fecha, los dispositivos que operan con Windows 10 dejarán de recibir actualizaciones de seguridad y soporte técnico regular, dejando a los usuarios vulnerables a riesgos de ciberseguridad.
Para contrarrestar este problema, Microsoft ha decidido extender su programa ESU, ofreciendo a los usuarios la posibilidad de recibir actualizaciones adicionales más allá de la fecha de finalización del soporte.
Windows 10 ESU: precio y condiciones
El vicepresidente ejecutivo y director de marketing de consumo de Microsoft, Yusuf Mehdi, publicó ayer una larga publicación en la que sugería a los clientes de Windows 10 que era hora de prepararse para la actualización a Windows 11.
ESU para usuarios domésticos: una solución accesible, pero limitada
La gran novedad de este anuncio es que Microsoft ahora permite a los usuarios domésticos acceder al programa ESU, algo que anteriormente estaba reservado exclusivamente para empresas. Sin embargo, esta opción viene con ciertas condiciones:
- Costo: Los usuarios deberán pagar 30 dólares para acceder a un año adicional de soporte, desde octubre de 2025 hasta octubre de 2026.
- Duración limitada: A diferencia de las empresas, que pueden extender el soporte hasta por tres años (hasta octubre de 2028), los usuarios domésticos solo tendrán derecho a un año adicional de actualizaciones.
- Restricción de uso: El programa ESU para usuarios domésticos está limitado a uso personal , lo que significa que las empresas no podrán optar por esta opción más económica.
¿Por qué Microsoft limita la duración del ESU para los consumidores?
Esta decisión refleja un intento de Microsoft de impulsar la migración a Windows 11 , su sistema operativo más reciente. La compañía ha sido clara en su mensaje: considera que los usuarios deben empezar a planificar la actualización a Windows 11 para garantizar una experiencia más moderna y segura.
Sin embargo, esta opción de ESU puede ser vista como un "respiro" para quienes no pueden o no desean actualizar inmediatamente, ya sea por limitaciones de hardware o por preferencias personales.
Costo para empresas: un enfoque diferente
Aunque el costo para los usuarios domésticos es relativamente asequible, 427 dólares por los tres años completos de soporte ESU representan una inversión considerable para las empresas que aún operan con Windows 10. Este precio refleja la política de Microsoft de priorizar la transición hacia nuevas plataformas en el ámbito corporativo.
¿Vale la pena pagar por ESU?
La decisión de optar por el programa ESU dependerá de varios factores:
Compatibilidad del hardware: Muchos dispositivos actuales que operan con Windows 10 no cumplen con los requisitos mínimos de Windows 11, lo que obliga a los usuarios a invertir en nuevo hardware para actualizar.
Nivel de riesgo: Sin actualizaciones de seguridad, los dispositivos que ejecutan sistemas obsoletos serán más vulnerables a ataques cibernéticos. Para quienes trabajan con datos sensibles, pagar por ESU podría ser una inversión prudente.
Presupuesto: Aunque 30 dólares es un costo accesible, la falta de opción para extender el soporte más allá de un año puede hacer que esta inversión sea menos atractiva para algunos usuarios.
Conclusión: una transición inevitable
El anuncio de Microsoft de incluir a los usuarios domésticos en el programa ESU para Windows 10 representa un paso importante hacia la inclusión, pero también subraya la estrategia de la compañía para facilitar la adopción de Windows 11.
Para quienes desean extender la vida útil de sus dispositivos actuales, el programa ESU es una solución temporal. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta extensión solo aplaza lo inevitable: la necesidad de actualizarse a Windows 11 o considerar alternativas para mantener la seguridad y funcionalidad en un mundo digital en constante evolución.
Si estás usando Windows 10, ¿qué planes tienes para el futuro de tu sistema operativo? ¡Comparte tu opinión en los comentarios!
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